Como MEJORAR la FUERZA DE VOLUNTAD

Si quieres mejorar tu fuerza de voluntad, en este post aprenderás 8 consejos que te ayudarán a conseguirlo. Comencemos.

1. Planifica con antelación

Dale un respiro a tu fuerza de voluntad tomando decisiones con antelación: Programe su menú para toda la semana e incluso prepare algunas comidas por adelantado. Esto le ayudará a evitar paradas impulsivas en restaurantes de comida rápida de camino a casa desde el trabajo. Antes de ir a una fiesta o a un restaurante, decide si vas a beber alcohol y cuánto vas a beber.

No intentes hacer ejercicio en lo que te queda de día. En su lugar, prográmelo en su calendario al principio de cada semana o planifique ir con un amigo, así será más probable que cumpla ese compromiso.

2. Trabaje en un cambio a la vez

La fuerza de voluntad y la motivación pueden aumentar, pero es un proceso lento y gradual. Trabajamos con una cantidad fija diariamente.

No podemos cambiar todo de una vez, y no podemos cambiar masivamente nuestra vida en momentos de estrés. Si queremos ver un cambio real, debemos empezar poco a poco y abordar un objetivo a largo plazo cada vez.

3. Dormir bien

Un descanso adecuado mejora nuestra autodisciplina y proporciona un entorno óptimo para el funcionamiento del cerebro. El descanso reduce la necesidad de glucosa del cuerpo y permite que éste aproveche mejor lo que tenemos. El descanso adecuado suele ser de 7 a 8 horas por noche para un adulto, y de 10 a 12 horas por noche para un niño.

El autocontrol requiere poder cerebral y altos niveles de energía, y cuando estamos cansados, nuestro cuerpo generalmente no entrega suficiente glucosa a nuestro cerebro. Dormir es esencial para tener más fuerza de voluntad.

4. Evitar las tentaciones

Las personas que tienen mucho autocontrol no necesitan ejercitar su fuerza de voluntad tan a menudo. Por lo tanto, cuando la fuerza de voluntad es necesaria, es fuerte y constante.

Puedes aumentar tu fuerza de voluntad si no te pones en situaciones en las que la fuerza de voluntad es necesaria y te alejas de esos «puntos peligrosos» en los que la tentación está presente y la fuerza de voluntad es necesaria.

5. Desarrolle pequeños pero poderosos hábitos

Las investigaciones confirman que los buenos hábitos nos ayudan mientras aprendemos a aumentar la fuerza de voluntad. Incluso si empezamos con algo sencillo, como hacer la cama, esto puede tener un efecto poderoso y positivo en nuestra fuerza de voluntad. Esto ocurre porque estos pequeños hábitos crean autodisciplina y autocontrol, y eso se extiende a otras áreas de nuestra vida.

6. Haga una lista de tareas manejable

Todo el mundo tiene algún tipo de lista de tareas pendientes, ya sea en papel o no. Puede que no nos demos cuenta, pero esta omnipresente herramienta de productividad puede estar aumentando nuestro estrés y disminuyendo nuestra fuerza de voluntad.

Cuando creamos listas interminables y dejamos tareas perpetuamente sin hacer, nuestro subconsciente nos regaña al respecto, y acabamos preocupándonos mucho más que actuando. Cuando hacemos esto, nos ponemos de mal humor, y nuestro estado emocional juega a favor de nuestra capacidad para resistir la tentación.

7. Tome descansos frecuentes

Es imposible ejercer un autocontrol perfecto todo el tiempo. Simplemente nos quedamos sin fuerza de voluntad y acabamos tomando malas decisiones si no nos complementamos con descanso y pausas.

Duerma una siesta de vez en cuando, tome un snack saludable, vea un poco de televisión durante uno o dos minutos, y luego vuelva a sus tareas y objetivos mientras aprende a aumentar la fuerza de voluntad.

Cuando hagas esto, volverás renovado y tendrás más fuerza de voluntad para producir un mejor trabajo.

8. Medite durante 5 minutos al día

Tómese 5 minutos y concéntrese sólo en su respiración. Desconéctese durante sólo cinco minutos del caos que le rodea mientras trabaja en cómo fortalecer la fuerza de voluntad.

Cada vez que su mente divaga, tiene que gastar energía para volver a encauzarla, recurriendo a su reserva de fuerza de voluntad. El simple acto de crear conciencia de sí mismo a través de la mediación le ayudará en su tendencia a los impulsos.

Cuando nos volvemos conscientes, también estamos activando la parte de nuestro cerebro que necesitamos para la fuerza de voluntad, en lugar de dejar que nuestros impulsos tomen el control.