Si quieres crear un fondo de emergencia, en este post aprenderás los 6 pasos para conseguirlo.
1. Revisa tus finanzas
Controla tus ingresos, gastos y costes durante al menos tres meses normales (no los meses con muchos cumpleaños, vacaciones, etc.) para saber con cuánto dinero cuentas cada mes.
Es importante que revise sus finanzas no sólo para saber a qué se destina su dinero, sino también para estar al tanto de su presupuesto y evitar gastar en exceso.
2. Establece un objetivo de fondo de emergencia
Es importante establecer un objetivo de fondo de emergencia y lo mejor empezar con un fondo pequeño y luego trabajar para conseguir otro fondo de emergencia completo (idealmente, de 3 a 6 meses de gastos de subsistencia).
Un minifondo puede utilizarse para gastos de bajo coste, pero que desbaratan el presupuesto, como el mantenimiento del auto, un viaje rápido para un funeral familiar o para dar la bienvenida a un nuevo bebé, la reparación inesperada de un electrodoméstico, o unos días libres por enfermedad.
Un fondo de emergencia completo es para la pérdida prolongada del trabajo o para gastos inesperados importantes, como reparaciones costosas del auto o reemplazo de electrodomésticos, ayudar a un familiar en crisis, etc.
3. Trabaja en tu presupuesto
Basándose en su presupuesto mensual y en su objetivo, elabore un plan que le ayude a conseguirlo. ¿Qué gastos tiene que reducir o cómo puede distribuir su dinero de forma diferente para asegurarse de que está guardando suficiente dinero cada mes para su fondo de emergencia?
Mira qué cambios puedes hacer en tu día a día para mejorar tu presupuesto y aumentar tus ahorros. ¿Puede comprar en algún sitio más barato, utilizar más los cupones o elegir marcas sin nombre?
Cuando busques formas de maximizar tu presupuesto, no olvides pensar también en las oportunidades de generar más ingresos. Hay muchas maneras de hacer pequeños cambios cada día y generar múltiples fuentes de ingresos, así que ponte creativo y encuentra lo que mejor te funcione.
4. Mantén tu dinero fuera de tu vista
Mantener tu dinero fuera de la vista y de la mente hará que sea más difícil acceder a él, por lo que es menos probable que gastes. Investiga y encuentra la mejor cuenta para depositar tus ahorros y prescinde de la tarjeta bancaria.
Al no tener una tarjeta bancaria, te lo pensarás dos veces antes de tocar el dinero de esa cuenta. No querrás poner tu dinero en un lugar demasiado accesible en el que sea fácil gastarlo, pero tampoco querrás tenerlo en un lugar demasiado inaccesible (como inversiones) del que no puedas tirar cuando surja una emergencia.
5. Págate a ti mismo primero
Una vez que haya calculado cuánto dinero puede reservar de forma realista cada mes para su fondo de emergencia y haya creado una cuenta para ello, trate su fondo de emergencia como un gasto más.
Establezca pagos automáticos como lo haría con sus otras facturas, para no tener que pensar en ello. Así te asegurarás de no gastar accidentalmente ese dinero antes de ahorrarlo y te ahorrarás la molestia de añadir una cosa más a tu lista de tareas.
6. Determina lo que consideras una emergencia financiera
Este es el paso más importante. Determine lo que constituiría una emergencia financiera. Pregúntese si aquello para lo que necesita dinero es una necesidad real o un «deseo». No recurra a su fondo de emergencia si no hay una emergencia.
Has creado esta cuenta de ahorros para que te ayude cuando más lo necesites, ya sea por la pérdida del trabajo, una enfermedad, una reparación urgente del auto o de la casa, un viaje inesperado, etc.
Defina qué es una emergencia para usted. ¿Qué es ese «gran susto» del que quiere protegerse? ¿Qué constituye una «necesidad» de recurrir a su fondo de emergencia? Y luego, ¡sólo saque dinero de su cuenta cuando lo necesite de verdad!