Aquí hay 7 malos hábitos con el dinero que debe romper para tomar el control de sus finanzas personales y comenzar a acumular riqueza.
1. No tener un presupuesto
La gente de todos los ingresos financieros tiene presupuestos. Son útiles y necesarios para hacer seguimiento del dinero.
Si sus gastos están fuera de control, o simplemente no tiene una idea de lo que compra cada mes, necesita tener un presupuesto.
No basta con crear un presupuesto, el factor más importante es que tienes que decidirte a cumplirlo. Puede ser difícil al principio, pero para conseguir estabilidad financiera, tienes que controlar cada una de las compras que haces.
Con un presupuesto, podrás ver tus hábitos de gasto y ajustarlos para que funcionen con tus finanzas.
2. No tener ahorros
Mi cita favorita sobre finanzas es de Warren Buffett, «No ahorres lo que queda después de gastar, gasta lo que queda después de ahorrar«.
Tener una cuenta de ahorros es muy importante. Tu dinero no debería estar en tu cuenta corriente. Incluso si sientes que tienes una idea de tus hábitos de gasto, el dinero debe ser ahorrado frecuentemente en una cuenta de ahorros.
La razón por la que es un mal hábito de dinero no tener una cuenta de ahorros es que vivimos en un mundo al azar. En cualquier momento, podrías tener una emergencia financiera, ¿Estarías preparado?
Una cuenta de ahorros ayuda a minimizar los riesgos del dinero. Aunque no puedes evitar cosas como autos averiados, emergencias médicas, o cargos ocultos, puedes estar preparado con el dinero que fue puesto intencionadamente en una cuenta de ahorros.
3. Darse un gusto demasiado a menudo
La gente derrocha con demasiada frecuencia, típicamente usando tarjetas de crédito, en artículos que no necesitan. Este mal hábito financiero es una de las formas más rápidas de meterse en un agujero de deudas.
Para contrarrestar esta mentalidad, dejemos que el «darse un gusto» represente lo que inicialmente se pretendía: un regalo. Los regalos no ocurren todos los días. Si lo hicieran, no sería un regalo, sólo un estilo de vida.
En su lugar, permítase un gusto cuando realmente lo merezca. Es una recompensa por lograr algo, sin importar cuán grande o pequeño sea. No te excedas.
4. Pagar el saldo mínimo de tu tarjeta de crédito
Si solo está haciendo los pagos anticipados mínimos de cualquier deuda que tenga, estará en números rojos mucho más tiempo de lo que cree. En muchos casos, terminará pagando más del doble por los artículos comprados debido a los intereses cobrados.
Cada pequeño extra que pueda pagar sus deudas reduce la cantidad de intereses que tiene que pagar. Establezca un plan, determine qué deuda debe pagar primero y hágalo.
5. Aplazar tus metas financieras
Aplazar tus metas financieras es una forma segura de no alcanzarlas nunca. Somos criaturas de hábito, y a veces ese hábito significa decirnos a nosotros mismos que nos ocuparemos de algo mañana/pronto/luego/al final de la semana, y luego nunca lo hacemos.
Si te has estado diciendo a ti mismo que «llegarás» a crear un fondo de emergencia, «llegarás» a ahorrar para la jubilación, «llegarás» a afrontar esa deuda de la tarjeta de crédito… es hora de llegar a ello.
Cuanto más tiempo pospongas algo, es más probable que nunca empieces, y mucho menos que termines. Usted es el único responsable de cumplir sus propias metas financieras; nadie más lo hará por usted.
6. Vivir más allá de tus posibilidades
Este es muy posiblemente el peor de todos los malos hábitos financieros, porque abarca muchos de los más pequeños. Vivir por encima de tus posibilidades es la forma más rápida de endeudarse, la forma más fácil de arruinar tu puntaje de crédito, una forma segura de romper tu presupuesto, y una forma definitiva de reducir tus ahorros.
Lo que pasa con vivir por encima de nuestras posibilidades es que todos lo hemos hecho en algún momento. Para eso están las tarjetas de crédito, ¿verdad? Para pagar cosas que no podemos pagar en efectivo. Sin embargo, el problema comienza cuando dependes de esa tarjeta para cubrir lo que posiblemente no deberías comprar.
El mayor culpable cuando se trata de vivir por encima de tus posibilidades es la tarjeta de crédito.
Si cuentas con ese pequeño pedazo de plástico, estás viviendo más allá de tus posibilidades. Si estás pasando esa tarjeta por cosas que no puedes pagar en el próximo mes, es hora de reconsiderar tus hábitos de gasto.
Es tan simple como esto… ¡No gastes lo que no tienes!
7. Depender solo de una fuente de ingresos
Tener una sola fuente de ingresos puede funcionar a tu favor por un tiempo, pero ¿qué pasa si pierdes ese trabajo? ¿Qué pasa si la empresa fracasa?
Depender de una fuente puede ponerte en una situación financiera difícil si surge algo. Pero también puede mantenerte en la quiebra.
Para crear riqueza y obtener ingresos pasivos, deberías invertir en acciones, iniciar un negocio paralelo (como un blog), invertir en bienes raíces, trabajar por cuenta propia, etc.