4 cosas que impiden tu crecimiento personal

El crecimiento personal abarca muchas cosas – es un viaje de toda la vida, después de todo! Aprender nuevas habilidades e información, mejorar la calidad de vida y trabajar para alcanzar metas y sueños son todos aspectos del crecimiento personal.

Entonces, ¿por qué puede parecer tan difícil iniciar realmente ese crecimiento personal?. Una vez que seas capaz de señalar qué es exactamente lo que te está frenando del crecimiento personal, podrás aplastar ese contratiempo y empezar a trabajar de verdad en ti mismo.

1. No te has tomado el tiempo para pensarlo bien

El primer paso para mejorarnos a nosotros mismos es pensar en lo que esperamos lograr y en qué tipo de persona queremos convertirnos en el proceso.

Obviamente, si no nos tomamos el tiempo para pensar en este primer paso, simplemente no llegaremos muy lejos. Saber lo que queremos lograr y quiénes queremos ser es el factor que impulsa nuestras historias de crecimiento personal, es lo que nos motiva a seguir aprendiendo y mejorándonos, y es lo que nos empuja a seguir adelante cuando tenemos ganas de rendirnos.

La solución a esto es simple! Dedica un poco de tiempo a reflexionar sobre las siguientes preguntas, que pueden guiarte en tu viaje hacia el crecimiento personal:

– ¿Qué áreas de tu vida esperas mejorar? Podría ser su carrera, finanzas, salud, relaciones, hobbies… ¡cualquier cosa!

– ¿Quién es tu mayor inspiración en la vida? ¿Qué cualidades hacen de esta persona un gran modelo a seguir para ti, y cómo puedes empezar a construir esas cualidades en ti mismo?

– ¿Qué meta o sueño te gustaría alcanzar en los próximos 5 o 10 años? ¡Da los pasos de cómo puedes llegar allí!

2. No estás seguro de qué objetivos quieres alcanzar o has renunciado a ellos.

Después de pasar un tiempo reflexionando sobre las preguntas anteriores, sus objetivos a largo plazo pueden ser un poco más claros. Sin esa claridad, es difícil ver cómo avanzar y qué pasos tomar a continuación.

Puede parecer aún más difícil si has tenido fracasos o pasos en falso en el pasado. Fijarse la misma meta mes tras mes o año tras año y nunca ser capaz de cumplirla puede sentirse como una derrota – ¡pero ten en cuenta que todos hemos estado ahí!

Si este es el caso, tómate un tiempo para pensar en los pasos que has dado en el pasado para alcanzar esa meta. ¿Qué funcionó y qué no funcionó? ¡Desarrolla un plan que sientas que realmente te preparará para el éxito esta vez!

Una vez que sepas qué objetivos quieres alcanzar, ¡crear el camino para aplastarlos es mucho más sencillo! Si tienes una meta a largo plazo, divídela en pasos más pequeños que puedas dar cada mes para acercarte a ella. Al hacerlo, te asegurarás de que realmente estás trabajando hacia esa meta cada mes y te dará una gratificación instantánea al alcanzar esos mini-objetivos!

3. No crees que estás listo para el cambio

Si estás luchando con la creencia limitante de que no estás listo para el cambio, entonces es hora de superar ese bloqueo mental! El cambio puede ser algo que asusta, pero he aprendido que casi siempre es algo GRANDE.

Reflexiona sobre lo que te llevó al punto de no sentirte listo para el cambio – fracasos pasados, relaciones tóxicas, miedo? No importa lo que te haya traído aquí, sólo recuerda que es posible superarlo.

También es importante aceptar el hecho de que el crecimiento personal es un viaje de toda la vida, ¡y algo por lo que tenemos que esforzarnos el resto de nuestros días! En lugar de ver esto como algo que asusta, véanlo como una increíble oportunidad – no necesitamos ser perfectos de inmediato porque este crecimiento es algo que perseguimos activamente todos los días.

El cambio da miedo. Pero seguir siendo exactamente la misma persona que somos ahora es más aterrador. ¡Derribemos lo que sea que nos esté frenando y comencemos este increíble viaje!

4. No tienes los recursos para avanzar

¡A veces todo lo que necesitamos es un pequeño empujón en la dirección correcta! La autorreflexión y saber por dónde empezar el viaje de crecimiento personal puede ser difícil, pero con los recursos adecuados, es en realidad muy simple.

Utilizar recursos gratuitos como blogs y podcasts es un gran lugar para empezar. También hay un sinfín de libros y cursos por ahí que te inspirarán para mejorar tu vida.

Una vez que empieces a utilizar estos recursos, te sorprenderás de lo rápido que cambia tu forma de pensar. Se sentirá más inspirado, agradecido y LISTO para trabajar para mejorar cada día! Y no hay nada mejor que eso!