10 hábitos que MATAN TU MOTIVACIÓN

Mantenerse motivado te mantendrá productivo en el logro de tus objetivos. Pero, ¿qué pasa si te falta la motivación y simplemente no estás haciendo tus tareas y no puedes decir qué lo está causando? Aquí hay unos 10 hábitos que matan tu motivación y de los que debes cuidarte.

Procrastinacion

La procrastinacion es el acto de retrasar o posponer una tarea. Retrasar o posponer las tareas puede hacer que pierdas la motivación. Esperar a trabajar disminuirá el entusiasmo y la creatividad para sus tareas.

Si sigues poniendo excusas como «déjame empezar bien el lunes o la semana que viene» te sorprenderá que el tiempo haya pasado volando y que aún no hayas empezado tu proyecto.

Comparaciones

La forma más rápida de perder la motivación es compararse con otras personas. Las comparaciones pueden quitarte la alegría de tu vida y dejarte desmoralizado.

En lugar de hacer comparaciones, estudie a sus competidores o compañeros y vea lo que puede aprender de ellos.

Perfeccionismo

El perfeccionismo destruirá tu motivación en el sentido de que te encontrarás gastando mucho tiempo pensando demasiado en algo y tratando de hacerlo perfecto.

Simplemente empieza, termina el proyecto y cambia las cosas pequeñas después.

Multitarea

La multitarea puede parecer una buena manera de matar dos pájaros de un tiro, pero puede ser un verdadero asesino de la motivación. Cuando estás por todas partes con tus tareas tu mente no puede concentrarse.

Es mejor concentrarse completamente en una tarea y una vez que la hayas terminado, puedes pasar a la siguiente.

Permitiendo distracciones

Permitir distracciones como la televisión o la música contribuirá a que pierdas la concentración y, en última instancia, la motivación. Aunque algunas personas han dicho que funcionan bien con algo de música de fondo, este método puede ser un desafío para la mayoría.

Indecisión

Si fallas o te retrasas en la toma de decisiones, es probable que pierdas la motivación en la mayoría de tus proyectos.

No tomar una decisión rápidamente trae consigo otras distracciones y pueden surgir otras cosas que pueden llevar a que tu plan no funcione en absoluto.

Falta de autocuidado

En la medida en que quieras ejecutar tus ideas y planes y lograr tus objetivos pronto, todavía tienes que hacerte una prioridad. No te olvides de tu propio cuidado personal.

Si descuidas estas necesidades básicas, te encontrarás constantemente sintiéndote cansado y perdiendo la motivación.

Exagerar

No exageres, de lo contrario te quemarás. Ser productivo es importante, pero a veces sólo necesitas tomarte un descanso. Tu mente y tu cuerpo lo exigirán. No eres una máquina. Si has trabajado demasiado, tómate un descanso, tal vez un fin de semana libre.

Ayuda a tu mente a refrescarse y a despejarse. Cuando vuelvas a tu trabajo, te darás cuenta de que estás más motivado. Esto revitalizará tu cuerpo mientras esperas una nueva semana de trabajo.

Miedo al fracaso

La sensación que uno tiene después de haber fallado no es una buena sensación. Esa es la razón por la que la mayoría de la gente tiende a temer al fracaso. Pero, el fracaso no es necesariamente algo malo.

Todo depende de cómo lo veas. Me gusta pensar en el fracaso como una lección. Es una retroalimentación. Te dice lo que hiciste mal para que tengas la oportunidad de arreglarlo y hacerlo mejor la próxima vez.

No decir que no

Para ser productivo, tienes que aprender a decirte no a ti mismo y a los demás. Di no al ocio antes del trabajo y di no a los amigos que exigen tiempo. Acostúmbrese a no sentirse culpable por decir no a las exigencias de los demás.

Aunque es cierto que pueden necesitar tu ayuda, a veces no tienes tiempo. Prioriza tus propias tareas primero y luego usa el tiempo que te queda para ayudar a los demás.